DESPEDIDA

Recibí tus besos y una lágrima.

Los besos los entendí, pero...¡el agua!, ¿de donde viene el agua?; ¿de la soledad?; ¿ del amor?; ¿del dolor? ,

¿ o es aquella mole de hielo que dificultaba el tránsito natural de la vida en los Océanos, y hoy comenzó a derretirse?.

...He seguido camino mientras cientos, miles de gotas de lluvia golpeaban los cristales. Cada gota me recordaba esa lágrima de sal que he visto en tus ojos. Así, un camino así...a golpe de lágrimas, de música y silencio.

Hoy, te he visto correr.

Me ha dolido tu bondad, pero me he ido porque los campos están llenos de “lilares” que empiezan a despuntar con hojas moradas-verdosas.

¡Tengo que estar!.

Las lilas aparecen de sopetón. Deben coger la luz de la luna para amanecer frescas, cautivadoras, aromáticas y llenas de esplendor. No son flores para rezagados.

Esta Primavera, estaré en los campos para verlas nacer.

Caía la lluvia y se oía un piano...

El paisaje era nuevo...

CLARA